Sobrecarga de comida.

El estomago de los niños así como resistente es delicado también, puesto que después del primer año de vida empiezan a morir las defensas que les pasamos las mamas por medio de la placenta y empiezan a crear ellos las propias.

Que conveniente ¿no? esto pasa exactamente cuando los niños empiezan a ser más independientes, ya dominan el gateo e incluso hasta caminan, su curiosidad crece y empiezan a aprender para que sirven las cosas que utilizamos los adultos y como siguen en la etapa oral, todo lo que agarran va directamente a la boca.

Y es de esta manera que cualquier pequeña cosa que ellos hagan o les crea defensas o les crea infecciones; entre estas cosas están comer ligeramente de más.

Si bien es cierto que todos nacemos con el mecanismo para aceptar el alimento en cantidades exactas, es decir cuando estamos satisfechos de comer dejamos de hacerlo, es decir no conocemos la gula y obviamente de bebés y chiquitos no la hemos desarrollado, también es cierto que desde chiquitos tenemos alimentos preferidos, sobre todo aquellos que vendan en cualquier tiendita y tengan algún empaque de celofán.

Y ¿qué hacer si esto le pasa a nuestros chiquitos?

Quizás no sea necesario acudir al pediatra y nosotras en casa podamos ayudarles con este problema OJO: Y ESTO NO SIGNIFICA QUE RECOMIENDE NO IR AL PEDIATRA es sólo que si el problema no avanza a infección el organismo de los niños con un poco de ayuda nuestra se regularizará.

Primeros síntomas: Vómito y/o Diarrea

La mejor medicina para el vómito: el ayuno. No hay que darles cosa que vomitar, así de simple. Un ayuno de 4 horas aproximadamente, con sólo algunos traguitos de agua o té ligero (a como el niño lo vaya aceptando) le ayudará mucho. Después de esto empezamos a introducir bocaditos de alimentos blandos y conforme lo vaya aceptando los vamos incrementando y así nos mantenemos durante 1 o 2 días con comidas chiquitas pero constantes (es decir cada 2 horas).

Diarrea: el ayuno + hidratación. Va más o menos por el mismo camino, hay que dejar que su cuerpo elimine lo que le hizo daño, y como esté estará resentido es importante no meterle grasas ni irritantes, y con grasas va incluida la leche. Es preferible alimentos blandos en pocas cantidades, y tenerle una especial atención a la re-hidratación.

Re-hidratación

Los niños especialmente se deshidratan demasiado rápido, y mamas HAY QUE EVITAR QUE ESO PASE. ¿Cómo? Pues tenemos varias opciones:

• Agua Natural
• Té ligero
• Jugo de manzana

Si la diarrea fue más de 1 vez al día entonces necesitaremos:

Gatorade. Por la botella con chupón y el sabor es recomendable empezar con esto, ahora que no sustituye como tal un SUERO ORAL  así es que si es necesario hay que introducírselos ya sea del de salubridad, el de la farmacia o que se prepare uno casero.

Si desde un principio los síntomas son crónicos, están acompañados de algún otro como lo son: ojos hundidos, sangre en la popó o en el vómito, labios resecos o cualquier otro, hagan caso omiso a mi artículo y corran al pediatra.

Ahora si no es el caso después de 6 horas no vemos mejoría en nuestros niños, aumentan los síntomas o los vemos en exceso decaídos y no podemos implementar ninguna de estas medidas también debemos de acudir al pediatra.

Bueno pues es todo, espero que algo de esto les sirva en algún momento de su vida, y sino pues al menos serán más cultos después de haber leído esto.

Cuídense y cuiden a sus hijos.

Rose